La hinchazón o inflamación en la vagina es un síntoma que muchas mujeres presentan a lo largo de su vida, debido a numerosos factores y afecciones, recomiendo prestar atención y acudir a su ginecólogo.
Esta inflamación en la zona íntima, llamada vaginitis o vulvovaginitis, puede deberse a reacciones alérgicas, cambios hormonales, traumatismos, infecciones bacterianas, micóticas, parasitarias o víricas. Por esta razón, es importante detectar el origen cuanto antes y analizar también los síntomas que acompañan a dicha inflamación.
Una reacción alérgica puede hacer que la vagina se inflame. Jabones, lubricantes, lavados y duchas vaginales, tampones, toallas sanitarias, anticonceptivos vaginales, lociones, cremas para el cuerpo y condones de látex pueden causar reacciones a la vagina debido a su sensibilidad.
El cuerpo puede reaccionar de forma opuesta cuando entra en contacto con ciertos productos y químicos que pueden causar inflamación en la vagina.
Algunos tipos de tela como la ropa interior de encaje o poliéster y el corte de la ropa interior pueden causar inflamación en la vagina. También las tangas muy finas, los bikinis, hilo dental que no cubran los labios por completo, pueden causar fricción y provocar inflamación.
Las relaciones sexuales pueden hacer que la vagina se inflame. Si la vagina no está lo suficientemente lubricada, la fricción adicional puede provocar molestias o dolor durante el sexo e inflamación después.
El sexo rudo también puede desgarrar los tejidos vaginales, aumentando el riesgo de infección.
Los quistes de los conductos de Gartner son inofensivos, pero pueden infectarse o causar dolor e inflamación en la vagina.
El quiste de Bartolino puede pasar desapercibido hasta que se infecta, la piel alrededor de la vagina puede inflamarse y doler.
La celulitis puede hacer que la zona afectada se hinche, enrojezca y se ponga sensible.
El embarazo también puede causar que la vagina se inflame entre otras cosas.