Hace unos años atrás las cesáreas eran un riesgo tanto para la madre como para el bebé, pero con el tiempo este escenario ha ido cambiando al punto que una cesárea se realiza con láser.
Con la técnica del láser hay menos destrucción del tejido. Antes era un riesgo realizar una cesárea se complicaba por los problemas de infecciones y de sangrado, pero con el avance relacionado con el tema de antibióticos, disponibilidad de transfusión la técnica ha ido en mejoría, este método ya no tiene tantos riesgos como un parto vaginal en condiciones normales.
La recuperación para una mujer que es sometida a una cesárea normal es algo lenta, podría tardar hasta un mes. Antes la paciente duraba hasta cuatro días hospitalizada.
Gracias a los avances tecnológicos los especialistas no tienen que utilizar el bisturí para realizar una cesárea por medio del láser.
Sin duda la técnica del láser es beneficiosa ya que se ahorra costos de hospitalización.
Dicha técnica la realizamos en nuestro centro y tiene tres ventajas importantes: recuperación rápida y con menos dolor, poco sangrado y poco riesgo de infección en la herida.
Este procedimiento al dañar menos el tejido que la cesárea tradicional, se recupera mejor.
Además con esta técnica del láser no existe ningún riesgo para el bebé, porque el láser no se usa en el momento de abrir el útero, por lo que el niño nunca sufre alguna alteración, nosotros tenemos todo el control mientras realizamos el procedimiento, los cortes de las cuatro o cinco capas de la piel se realizan con el láser.
Con el láser se deja a un lado el bisturí, las tijeras e incluso el electrocauterio que es utilizado para calentar los tejidos y detener el sangrado durante la cirugía.
Desde hace un tiempo realizamos esta técnica en nuestro centro y la aceptación de las madres es muy buena pero se la realizamos cuando son cesáreas electivas y no de emergencia.
Esta técnica también la implementamos en el rejuvenecimiento vaginal, cuando las mujeres han tenido problemas en los partos naturales.