La labioplastia generalmente se realiza bajo anestesia local, es un procedimiento de cirugía plástica que reduce el tamaño y en algunos casos la forma de los labios mayores o menores. No obstante, se realiza con más frecuencia en los labios menores.
El objetivo de esta intervención es reducir el tamaño de los labios menores para que no cuelguen debajo de los labios mayores cubiertos de vello púbico. Se puede realizar una labioplastia para disminuir la asimetría cuando uno de los labios es más largo que el otro, aunque lo más común es reducir la longitud de ambos para que los labios menores no sobresalgan más allá de los labios mayores.
La labioplastia, es una intervención quirúrgica que cambia la forma de los labios vaginales. Y la demanda cada día va en aumento y al parecer se debe a la popularidad de las mallas ajustadas, las cuales pueden hacer que algunas mujeres se sientan cohibidas o incómodas físicamente debido al tamaño y la forma de sus labios.
Esas prendas son muy ajustadas, por lo que, si una mujer tiene unos labios muy grandes, podrían acentuarlos. Algunas pacientes se sienten más cohibidas que otras. Y es una fuente de preocupación.
Las irregularidades en el contorno de los labios pueden ser más evidentes cuando se usa ropa ajustada como las mallas deportivas, los bañadores o los vaqueros.
En 2021 se realizaron casi 19 000 procedimientos de labioplastia, un 36 % más que en 2020, según el Centro Nacional de Datos de Cirugía Plástica y Estética. Sin embargo, antes de esa fecha las solicitudes de labioplastias ya habían aumentado en más del 217 % del 2012 a 2017, según datos de la Sociedad Estadounidense de Cirujanos Plásticos y Estéticos. “Parece que ha ido aumentando con el paso de los años. Hay más conciencia de ello… y tal vez se habla de ello con más normalidad asumiendo que no es motivo para avergonzarse.
La labioplastia a veces se denomina cirugía cosmética de diseño de vagina, pero no es un término muy preciso, aunque suene bien, porque este procedimiento no cambia la forma de la vagina, que es un tubo interno y elástico de tejido muscular que se extiende desde la abertura vaginal hasta el útero, sino que se enfoca en los genitales externos, específicamente en los cuatro “labios”.
Los labios externos, que están recubiertos de vello púbico, se llaman labios mayores. Los labios internos se llaman labios menores. En la parte superior, en el centro, se encuentra la capucha del clítoris, que puede cubrir una parte del clítoris o su totalidad. Debajo del clítoris se encuentra la abertura uretral y más abajo la abertura vaginal.
La anatomía de los genitales femeninos es muy variada. Los labios menores varían en longitud, grosor, simetría, prominencia y extensión respecto al borde de los labios mayores.
Cada cuerpo es diferente y eso también se aplica a las vulvas.
Existen dos tipos de labioplastia: la técnica de Trim y el método de cuña. En la técnica lineal o de Trim, se extirpa el tejido extra y se sutura directamente. Se suele usar cuando es necesario eliminar gran cantidad de tejido o cuando las pacientes solicitan la eliminación de los bordes irregulares oscuros de los labios menores, dejando solo el tejido rosa”.
El método de cuña o técnica de Wedge consiste en eliminar una cuña central o pieza triangular, casi como una rebanada de pizza, de la parte de los labios menores que sobresalen más. Las ventajas de esta técnica es que preserva la forma natural del borde y deja una cicatriz más pequeña. Los pliegues adicionales de la capucha del clítoris también se pueden reducir. El cierre generalmente se realiza con suturas reabsorbibles. La técnica elegida dependerá de la anatomía de la paciente y sus preferencias estéticas”.
La técnica de cuña tiene “algunas ventajas” porque la cicatriz está oculta, mientras que la cicatriz de la técnica lineal se encuentra a lo largo del borde de los labios. Con la técnica de cuña, básicamente no puedes ver la cicatriz. Como cirujanos plásticos, hacemos todo lo posible para camuflar u ocultar la cicatriz, independientemente de la parte del cuerpo donde se encuentre.